Te lo defino «a lo bruto«: el flujo de caja es la diferencia entre el dinero que entra en el cajón y el dinero que sale del cajón de tu comercio en un periodo de tiempo determinado.
Si nos ponemos un poco (sólo un poco más técnicos), una fórmula sencilla para calcular el flujo de caja es:
Flujo de Caja = Beneficios netos + Amortizaciones + Provisiones + Cuentas por pagar – Cuentas por Cobrar
Si el flujo de caja es positivo, las cosas van bien, si es negativo ¡precaución! Es un indicador muy muy importante. Yo tengo un llavero y un pisacorbatas (qué antiguo soy) con las iniciales CFIMITYM ¡por algo será!
¿Donde puede ver el flujo de caja de mi tienda? En las cuentas anuales de tu comercio. En uno de los 5 documentos o estados financieros que las componen: (1) Balance de situación, (2) Cuenta de pérdidas y ganancias, (3) Estado de cambios en el patrimonio neto (ECPN), (4) Estado de flujos de efectivo y (5) Memoria.
Si profundizamos en el análisis del Estado de Flujos de Efectivo (EFE) podemos distinguir:
- Flujos de efectivo de las actividades de explotación (FEAE).
- Flujos de efectivo de las actividades de inversión (FEAI).
- Flujos de efectivo de las actividades de financiación (FEAF).